Llegué
a casa algo cansada, pero mi peque tenía ganas de jugar, así que antes de la
cena me lo subo al ático, mi lugar favorito de la casa. Es un niño muy listo, juguetón
y cariñoso, me recuerda mucho a mi hermano cuando tenía su edad. Jugamos un par
de horas y después ayudamos a la abuela a poner la mesa.
Durante
la cena, noto que mi madre esta algo nerviosa, y temo que halla hecho alguna de
las suyas:
-Mama,
te noto algo inquieta ¿sucede algo?
-No...
no, que va... serán imaginaciones tuyas. –pero se que algo le preocupa.
-¡¡Madre
mía, Candela Serrantes Peña!! ¿Que has hecho? –le grita mi padre.
-¡¡Ay
Teo, cállate, por dios!! –y eso confirma mis sospechas.
-¡¡Mama!!
-Venga
todo el mundo a la cama, mañana hay que madrugar. –y así consigue escaquearse
de todo, pero se que algo ha pasado, alguna ha liado, y no me queda otra que
esperar a ver que pasa.
Mientras
me ducho, antes de acostarme, recuerdo la clase de gimnasia... imagino a Andrés
con el torso desnudo, sudando por el esfuerzo, mientras me mira. Me excito al
pensar en la posibilidad de una noche de sexo con el. ¿Será tierno, será romántico,
será salvaje? Y que importa, si nunca lo sabre.
Ya en
la cama no puedo dormir. Pienso en que habrá hecho mi madre, si tendrá algo que
ver con el, o si solo son cosas mías. Tocan la puerta de mi habitación:
-Cariño
¿duermes? –mi madre asoma la cabeza por la puerta.
-¿Mama?
¿Que pasa?
-No te
enfades... hoy estuve con Andrés.
-¡Joder
mama!
-Sshh...
Me preguntó por ti, el pensaba que venias con tu ex, y me preguntó si estabas
libre, si sales con alguien.
-¿Que?
¡Andrés pregunta si estoy libre, eh! Se paso por la panadería esta tarde.
-Yo le
dije que estabas allí. ¿Y compro pan?
-Si,
dos barras ¿por que?
-Jajajaja
tu tía Paca le lleva el pan por la mañana temprano.
-¡ah
si! Mama...
-Dime
cariño.
-Yo
estaba enamorada de Andrés en el colegio. Incluso le escribí algunas cartas.
-Lo se,
yo tengo esas cartas. Están arriba, en el ático.
-¿Tu las tienes? ¿Por que?
-Siempre
me pareció bonito como te declarabas, su familia siempre fue amable y cordial,
y pensé que algún día, vosotros...
-¿Nosotros?
No mama, el nunca se intereso por mi.
-¿Como
que no? Venia cada Lunes, antes de que te levantaras para ir al cole, y preguntaba:
¿señora candela, la Merche
esta para ir al cole?
-¿Todos
los lunes? ¿Y que contestabas tu?
-No Andrés,
aun esta en cama. Y el pobre se marchaba con la cabeza gacha. Si venia mas tarde,
tu ya no estabas, pero seguía viniendo todos los lunes. Cuando te casaste, su
madre me confeso que el lo paso mal.
-Pero
no entiendo, el nunca me hizo caso en el cole.
-Tienes
que hablar con el. Cuando le dije que estabas sola, que te separaste... madre mía
¡¡se le ilumino la cara!!
-¿De
veras mama? Ayer, cuando lo vi en el cole... sentí...
-Si me
di cuenta, parecía que habías visto un fantasma. Bueno, mañana, en el cole,
habla con el. Tiene un par de horas libres a primera hora. Me preguntó si llevarías
tu a Nico al cole, posiblemente querrá charlar. Buenas noches, que descanses.
–me beso la frente, como cuando era una niña, pero ahora se siente diferente.
Ahora se aprecia mas esa ternura, esas palabras antes de dormir, ese amor de
madre que tanto me faltaba.
-Gracias
mama. Buenas noches.
Son las
7:00. Aun me queda una hora y media para levantarme, pero no puedo dormir.
Estoy ansiosa por saber que sucederá hoy con Andrés. Me levanto, abro las
cortinas y el sol luce esplendido, su calor en mi cara me recarga de energía.
Estamos al final de la primavera, y aunque el fresco es notable a primera hora
de la mañana, decido ponerme un bonito vestido de cuadros y unas sandalias. Recojo
mi pelo en un moño despeinado y perfumo mis puntos estratégicos. Bajo a la
cocina, mi madre prepara el desayuno y papa ya esta en la huerta.
-¿Que?
-Estas
impresionante, no entiendo por que no te preparas así cada día.
-Anda
calla y dame una taza de café. –me sonrojo y me miro a través del cristal.
Posiblemente sea demasiado, debería subir y cambiarme, soy una mama, no debería
vestirme así.
-¡¡No,
ni se te ocurra!! –me grita mi madre.
-¿que?
¿Que pasa?
-Te
conozco, esa mirada y el gesto torcido de tus labios... vas a ir así al cole,
vas a hablar con ese hombre y escucharás lo que tenga que decirte, sin
rechistar ¿me oyes bien?
-Si
mama, esta vez si.
-Bien.
Ve a despertar al nene.
Mientras
desayunamos intento pensar en mi plan de escape, solo por si sale mal, pero
estoy de buen humor y las palabras de mi madre me hacen recapacitar.
Aunque
solo fuera una noche, aunque luego no
volviera a verle más...
Apenas
me quedan unos metros para llegar al cole y estoy nerviosa, como si fuera mi
primer día, mi primera vez:
-Hola
Merche.
-Andrés...
hola, buenos días. –le sonrío y el me devuelve la sonrisa...con algo mas.
-Estas
preciosa esta mañana ¿tienes una cita? –noto su mano por mi cintura.
-Si...
no... yo... no lo se.
-Has
hablado con tu madre ¿verdad? ¿Puedes esperarme en la puerta del cuarto de
gimnasia en... digamos 15 minutos?
-¡Ah!
Si, si claro.
-Bien,
hasta dentro de un rato. –me mira directamente a los ojos y me sonríe mientras
se muerde el labio inferior en un gesto muy erótico. No soy muy de indirectas, pero vamos, yo diría
que es una insinuación en toda regla, lo que hace que me ponga más nerviosa
aun.
Dejo a
Nico en el aula y me dirijo a mi “no cita” con Andrés. La puerta esta cerrada, así
que espero pacientemente mientras leo el tablón de anuncios. Han pasado ya los
15 minutos y no hay nadie, no se oye ni el susurro del viento cuando de
pronto... alguien me susurra al oído:
-Lo
siento, no me gusta llegar tarde a mis citas... ¿estas lista? -¿lista para que?
madre mía, esto no es lo que pensaba, este quiere proponerme algo para el cole
y yo pensando en sexo... ¡¡veras que lío!!
Abre la
puerta y me empuja suavemente hacia dentro. Es una pequeña habitación llena de
cosas para hacer gimnasia; pelotas, raquetas, cuerdas... esta todo en baldas
que parecen de metal y hay una pequeña luz en techo. Andrés cierra la puerta con
llave y yo comienzo a temblar.
-¿Tienes
frío? –me pregunta mientras coge mis manos.
-No...
yo... estoy aterrada.
-¿Pero
por que? ¿Tienes miedo de mí? –se acerca a mi, me apoya sobre las baldas, dejándome
completamente indefensa. Su mirada me pierde. Siento sus manos subir por mis
piernas.
-¿Quieres
que pare?
-¡¡NO!!
No, por favor.
-Podemos
ir más despacio, pero te deseo tanto, cuando te vi ayer... Merche. –sus suaves
labios en contacto con los míos. Sube una mano por mi trasero, mientras que la
otra se posa en mi cuello... y entonces me besa... pasional, húmedo. Su lengua
y la mía echan un pulso a muerte, como si estuviesen esperando este momento
dese hace décadas. Noto el frío metal en mi trasero y me excita. Con sumo
cuidado me quita las bragas, levanta mi vestido y lo sube hasta sacarlo por mis
brazos. Me observa, como si nunca antes hubiera visto algo así:
-Tu
piel es tan suave, y huele tan bien, eres una delicia Merche.
Siento
sus labios, húmedos y suaves sobre mis pechos, sus manos recorren mi chocho de
arriba abajo, despacio, como meciéndose. Noto como me humedezco por mis
fluidos, hacia mucho que no me excitaba así... quiero sentirle dentro de mi... abro
su bragueta y meto la mano, siento su miembro erecto y eso me lleva a la locura
mas absoluta. Como si fuera una necesidad le quito los pantalones, agachada y mirándole
a los ojos. El me agarra con sus manos, me acaricia tiernamente... y sin dejar
de mirarle me la meto en la boca, entera, hasta la campanilla ¡¡Merche!! ¿Que
haces? Me digo a mi misma... pero el cuerpo me lo pide y el lo agradece con sus
pequeños gemidos de placer. Durante un momento me siento poderosa, puedo
llevarle hasta el clímax solo con mi boca, puedo parar y pedirle que folle
ahora mismo... pero quiero que sea el quien decida, quiero, por una vez,
sentirme deseada...
Sin
decir nada, se agacha para levantarme y colocar mi culo sobre una balda fría,
abre mis piernas y me introduce la verga, dura y húmeda por mi saliva... el
placer es intenso... sus besos saben dulces, pero sus envestidas son
pasionales... me agarra con fuerza por la cintura... y lo noto, su chorro
inunda mi chocho y se mezcla con mis fluidos, sus gemidos en mi oído me
excitan, por que me dicen que esta gozando, y yo soy la culpable de ello.
-Te
toca. –me susurra. Sin moverme del sitio comienza a acariciar mi clítoris, su
polla aun sigue dentro de mí, y su lengua se ha vuelto más juguetona. Me
levanta hasta llegar con mis piernas a sus hombros, mi coño, completamente
expuesto en su cara, pide a gritos ¡¡cómeme!! Y no se hace esperar. Su juguetona
lengua aterriza en mi clítoris hinchado y húmedo, desliza sus suaves labios por
todo mi chocho, sus dedos entran lentamente por mi vagina... la excitación es máxima.
Acaricio su pelo mientras el agarra mi culo con las dos manos y aprieta mi coño
sobre su cara ¡¡se va ahogar, por dios!! Pero el placer es tan intenso que no
podemos parar, ni el ni yo. Me lleva al suelo y vuelve a penetrarme sin dejar
de acariciar mi clítoris, aun excitado y húmedo. Y así, sobre el suelo frío y
rodeada de pelotas y cuerdas de gimnasia, llego al orgasmo más placentero e intenso
de toda mi vida, con el amor platónico de mi adolescencia.
Continuara....
Uffffff Me encanta esta historia. Creo que se está convirtiendo en una de mis favoritas. Y si no viera la palabra "chocho" se me haría hasta raro jajajajaja Me temo que se está convirtiendo en tu seña de identidad, y mira que me encanta ;)
ResponderEliminarAsi que "chocho" eh!!! jajajaja a ver si tengo que cambiarme el "nombre" y firmar como "chocho" jajajaja
EliminarMe alegro que te guste gamberrita :-)) un beso
Ainsssss pero que rebonitos son este par... Me encanta esta historia, hay amores que por más que pase el tiempo no se olvidan y enterarse de que iba a buscarla todos los lunes, por dios, se puede ser más lindo?... Creo que ambos se debían ese polvo, si, se debían ese y muchos más... :)
ResponderEliminarJajajajaja... tus protas siempre acaban en el suelo, que tendrán las losas tan frías.. :p
Mil besinos guapa!!!
jajajaja el suelo frio es muy excitante :p
EliminarGracias, me alegro que te guste. A ver hasta donde llegan estos dos :-)
un beso potxola!!!
Me encanta :)
ResponderEliminarPor favor, menudo orgasmo más placentero... casi lo he sentido. Uf...
Un besito Itza :)
jajajajaja pues ya somos dos.... lo del orgasmo digo :p
Eliminarun beso Tatu
MENUDA SESIÓN EN EL GIMNASIO,,, SI ES QUE LAS MADRES SABEN MUY BIEN LO QUE LES CONVIENE A SUS RETOÑOS, JEJEJEJE....
ResponderEliminarUN BESAZO ITZALAK!!!
Ya lo creo, las mamis somos mu listas :p
EliminarUn beso LORD SHADOW :-))))
Mmmmmmmm
ResponderEliminarme vuelvo a la cama !!! ya!!
jopetas vaya relato
besos grandes
jajajajaja que paso MaRia? No te gusto o te gusto taanto que.... en fin jajajaja
Eliminarun beso guapa :-)))
¿Que pasó?
EliminarQue el hambre es negra!!
o lo que es lo mismo... que necesito comer carne jajaja
jajajajajaja
Eliminareste prota tuyo si me gusta, sabe lo que quiere y va a por ello sin esperas.
ResponderEliminarme encantan los orgasmos que aparecen en tus historias.
Me alegro que este te guste :-)))
Eliminary los orgasmos eh... y por que?
Estupendas las letras que nos dejas. Muy sugerente.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas gracias Antonio, me alegro que sean de tu agrado :-)))
Eliminarun saludo