Regálame tu sonrisa, alégrame con
tu felicidad… deja que fluya con intensidad.
Necesito tus risas, esas tan
divertidas… esas que me hacen llorar, pero de felicidad.
Sé que volverás, no sé cuándo
pero lo harás… por ti, por mí, por esas lágrimas y risas que añoramos en
nuestra profundidad.
Yo te regalo la mía.
ResponderEliminar:)
Besos de reencuentro.
Muchas gracias!!!
EliminarClaro que sí! Esa alegría volverá. Tú naciste para reír cada día, es tu destino, así que es cuestión de tiempo
ResponderEliminar